Lo que estalló el 18 de octubre no fue una revolución, ni una demanda clara, sino el hastío de la población ante un modelo que funciona solo para algunos. A cinco años del estallido social, el resultado no podía ser otro, ya que el diagnóstico nunca ha sido correctamente abordado. Sin un proyecto político coherente y una propuesta económica viable, el futuro será solo disolución social o autoritarismo.
Utrecht implementó una ley que impide a particulares e inversores comprar una segunda vivienda sin garantizar que vivan en ella. La medida ha favorecido a los compradores jóvenes, reduciendo la compra para inversión. Los resultados han sido positivos, con más propiedades adquiridas por nuevos propietarios y menos viviendas arrendadas. Se considera ampliar la ley a viviendas más caras.
El triunfo de la vivienda social en Viena nos enseña que cuando los gobiernos invierten en ellas como un derecho humano, se pueden combatir la desigualdad y la situación de calle. Haciendo de ella una inspiración para lo que otras ciudades pueden lograr si ponen las necesidades humanas por sobre las ganancias de los privados.
El genocidio es la consecuencia inevitable de la colonización, ya que busca destruir al pueblo originario y su cultura. La violencia es la herramienta central del colonizador, quien, a través del despojo y la deshumanización, justifica el exterminio del colonizado. Mientras el colonizado resiste con dolor y rabia, el genocidio se perpetúa, negando su derecho a existir y a defenderse. Cualquier forma de resistencia es vista como terrorista.
Un grupo de libertarios intentó transformar Grafton, New Hampshire, en una utopía de mercado libre, pero el proyecto se complicó cuando sus ideales chocaron con la resistencia local y un imprevisto crecimiento de la población de osos agresivos. La historia, narrada por Matthew Hongoltz-Hetling, examina cómo el idealismo político puede generar vulnerabilidad cuando se enfrenta a la naturaleza y las complejidades de la convivencia.
El nazismo utilizó el término “socialismo” como estrategia para ganar apoyo obrero, pero sus políticas económicas fueron profundamente capitalistas. A pesar de las intervenciones estatales, favorecieron la propiedad privada y la libre competencia. El régimen nazi se basaba en una ideología darwinista que veía a los “improductivos” como cargas económicas. La relación entre nazismo y socialismo es un mito impulsado por su uso cínico del término.
Matthew Perry, en su autobiografía, reflexiona sobre el impacto del juego Monopoly en su vida familiar. Aunque aparentemente inocente, el juego refleja la competencia y el conflicto, lo que se conecta con la historia del propio Monopoly, inicialmente creado como crítica al capitalismo por Lizzie Magie. La historia del juego revela cómo fue cooptado por intereses comerciales, distorsionando su mensaje original.
El juicio político a Trump no alteró la opinión pública debido a la saturación informativa y la polarización mediática. La estrategia de desinformación, orquestada por figuras como Bannon, busca generar escepticismo sobre la verdad. La sobrecarga de relatos contradictorios y la fragmentación de los medios dificultan la creación de consensos, alimentando el nihilismo y erosionando la confianza en las instituciones democráticas.
Conversación sobre justicia social, sostenibilidad, derechos de propiedad e issues indígenas. Se destaca la importancia de una sociedad más equitativa y sostenible, con ejemplos prácticos como jardines comunitarios y energías renovables. También se menciona la redistribución de tierras y la incorporación de perspectivas indígenas en las constituciones, como el ejemplo de Ecuador.
Este diálogo aborda críticas al liberalismo y el capitalismo, proponiendo una democracia popular que democratice tanto las esferas política como económica. Plantea la necesidad de redistribuir recursos y poder para lograr justicia social e igualdad, cuestionando si las personas pueden organizarse colectivamente sin caer en autoritarismos.